¡CORTEMOS DE RAÍZ EL MAL QUE ACECHA, PARA EVITAR SER PERVERSAMENTE CONTAMINADOS!

¡CORTEMOS DE RAÍZ EL MAL QUE ACECHA, PARA EVITAR SER PERVERSAMENTE CONTAMINADOS!

Se ha extirpado el cáncer evo cual maligno monstruoso boro, aunque permanece el fétido y promiscuo nido de multiplicadas niguas, que persisten con odio, saña y artimañas, obstinadas en su estilo de corromperlo todo, intentando destruir nuestra recién rescatada condición de sentirnos libres, que con valor y sacrificios oxigenó nuestros pulmones devolviéndonos la vida, dignidad y esperanzas por lograr al fin un porvenir pleno de armonía y felicidad que nos merecemos los buenos bolivianos.

De modo que para evitar se expanda la epidemia y resulte en irreparable nociva pandemia, se requiere de una completa cirugía que sin demora ni contemplaciones, ampute el mal antes que se convierta en incurable completa gangrena.

Si para ejecutar infernales delitos se nos impuso el lema de brutal accionar “metiéndole nomás” que aprovechó de un insólito estoicismo con irresponsabilidad y cobardía social generalizados, nada nos cuesta y mucho ganaremos, recuperando valor y firmeza que hemos demostrado en los multitudinarios cabildos realizados recientemente a nivel nacional, dar inmediata solución cortando de raíz la impostura demencial que pretende impunidad para continuar sin fin, evo y sus compinches cocaleros, con crímenes, corrupción y estrecho ligamen y hasta directa asociación con el genocida narcotráfico.

Y nada más oportuno que someter con auténtico rigor moral al legislativo actual dominado por la barbarie masista, a un contundente rechazo de la población civil movilizada pacíficamente cercando el desnaturalizado parlamento para que, de acuerdo a ley se enjuicie y encarcele con soberanía plena a todos los irresponsables sostenedores de una pretendida ley que afrenta a la propia Constitución, buscando liberar de culpa a quienes durante catorce largos años de tormentosa pesadilla encumbraron y sostuvieron la más horrenda dictadura plagada de crímenes, vicios y corrupción.

Para evitar tener que lamentar tardíamente groseros y cruentos acontecimientos, actuemos con celeridad, precisión, firmeza y contundencia, sabiendo que nos ampara no sólo la ley positiva si no que nos asiste gloriosamente la ultra Naturaleza de Dios Viviente, que busca para Bolivia y el mundo entero una convivencia colmada de Paz, Libertad, Justicia y Prosperidad. 

DAVID SERRATE PÉREZ, EL TAWA MANÚ .:. 

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