ARTERA Y LADINAMENTE EL INCAPAZ DESGOBIERNO ARCISTA IMPUSO DE IPSO FACTO UN MAL DISFRAZADO Y PERVERSO “GASOLINAZO”
El cínico y cobarde títere Luís Arce Catacora que se estrenó como villano titiritero con el criminal secuestro al Dr. Luís Fernando Camacho legítimamente elegido y en plenas funciones como gobernador por el departamento de Santa Cruz, perpetrado hace dos años, fue pésimo y despilfarrador “cajero” durante catorce desperdiciados años de semi dictadura masista, remozando su feraz implacable instinto inhumano, se atrevió burlonamente a imponer una disfrazada alza al precio de los carburantes que implica inevitablemente el inmediato encarecimiento de la canasta familiar, los medicamentos y el transporte en general, agravando la inestable y precaria economía que afecta mayormente a las desposeídas clases populares.
¿Puede llamarse a tal demencial sofista actitud como benéfica al pueblo? ¡Imposible, todo lo contrario! pues en el burdo mensaje presidencial por las fiestas patrias, espeta una absurda, incoherente e ilegal propuesta de “referéndum” que pretende, además de la tramoya por los carburantes e ineficacia para resolver la insolvencia fiscal altamente visible con la desaparición del dólar americano, enfrentar a las regiones con inconstitucional distribución de escaños parlamentarios que debe regirse correcta y precisamente en virtud a los resultados del censo por el cual luchó valerosamente el digno pueblo boliviano y principalmente la ciudadanía cruceña que amalgama y aglutina generosamente en su ciudad capital y sus 15 provincias al grueso de toda la bolivianidad que se halla hastiada de brutal e insaciable centralismo que ya casi lleva dos centurias de absorbente predominio, con pésima historia que patentiza la triste pérdida de dos terceras partes de su territorio original y el permanente saqueo de ingentes recursos naturales.
La continuada incapacidad administrativa del masismo arcista que es expresión lacerante del aún vigente colonialismo centralista, ha detonado con características de insostenible gravedad, aguda y explosiva conmoción social de impredecibles consecuencias, patentizando cada vez más y peor la ingobernabilidad del país, que lleva como inminente respuesta el desprecio y pérdida de paciencia del pueblo por toda la podredumbre política y judicial empoderada delictivamente de Bolivia.
DAVID SERRATE PÉREZ, MAHATMA KUMARÁSICO GEDEÓN PHIDLUZ .:.
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